Imagínese que busca una propiedad y ve un anuncio con un vídeo estupendo. Eso causa inmediatamente una buena impresión, ¿verdad? Un anuncio con vídeo destaca. Las imágenes en movimiento también mantienen la atención del comprador potencial durante más tiempo y son el medio ideal para transmitir una sensación, una atmósfera o un estilo de vida.
Los anuncios con vídeos son más reconocidos por Google. Por lo tanto, el ranking de la página será mejor y más clientes potenciales encontrarán su propiedad.
Por último, en un mundo en el que las redes sociales están adquiriendo cada vez más importancia en el marketing, el vídeo es fundamental.
Los vídeos no son demasiado largos, por lo que pueden compartirse perfectamente a través de diversos canales, como Youtube, Instagram o Facebook.
Por eso es la forma perfecta de mejorar la profesionalidad y el atractivo de una propiedad, pero también de mejorar enormemente sus posibilidades de comercialización.